POR WILLY Y KARINA HAMEL
MISIONEROS CRISTIANOS
Santiago dice: “Pero él nos da mayor ayuda con su gracia. Por eso dice la Escritura: «Dios se opone a los orgullosos, (soberbios) pero da gracia a los humildes.» (NVI Santiago 4:6)
Jesus dijo Aprendan de mi que soy manso y humilde de corazon y hallaran la paz para sus almas.
La sencillez de Jesus era impresionante. El que era el Rey de reyes era bueno humilde y sencillo como un nino. No había en el nada de altivez ni orgullo|
Pero ...Qué es la humildad?
* Vemos que es un sentimiento puro proveniente del reconocimiento de la propia flaqueza y fragilidad. Es decir mi Dios solo soy polvo y ceniza.. nada soy sin ti Yo solo soy un fragil vaso de barro..te necesito cada momento de mi vida. Necesito de Ti de tu fuerza de tu guia de tu gracia mi Dios
La persona humilde es una persona sencilla y dependiente de Dios. Siempre consulta con Dios . La persona orgullosa es independiente. dice yo se como moverme...yo hago las cosas a mi manera. Se siente capaz y se siente un experto. No busca a Dios ..siente que no necesita ser guiado por Dios.
*Ser humilde es ser sumiso . es ser ensenable. Acepta corrección acepta y respeta las autoridades superiores. Sabe sujetarse. No actúa independientemente .Pide permiso. no hay rebeldia en esa persona. No se siente superior a los demas.
* Es una persona que esta acostumbrada a dar toda la gloria a Dios Ella siempre cuida que todo honor y la honra y gloria sean dirigidas a Dios. Ella vive para que Dios sea exaltado .Ella no se eleva ni se exalta a si misma ella no quiere ser el centro de la atencion ella siempre busca que Jesus sea el centro y que El sea exaltado alabado y glorificado.
Ella dice el propósito de mi vida es que todos conozcan a Jesus lo admiren y lo amen y lo exalten y se vuelvan adoradores de El. Mi mayor felicidad es que todos amen y exalten a Jesus.
* La persona humilde se considera solo un instrumento de Dios. Humildad es reconocer que somos instrumentos usados para el cumplimiento de su voluntad. Una persona humilde nunca se creerá la unica que sabe o la unica que puede hacer algo. Sabe que todos los miembros del cuerpo de Cristo son muy valiosos cada uno con sus diferentes dones.
¿Cómo demostramos la humildad?
Uno puede ver lo mejor o ver lo peor de los demas. Demostramos humildad cuando tratamos de
buscar y ver lo mejor del prójimo; sirviéndonos los unos a los otros con amor y solidaridad como lo hizo Jesús. (Romanos 12:10 y Filipenses 2:3-4);
Tenemos un Dios bueno y compasivo El es el mejor padre del universo no hay nadie tan bueno y generoso como El. Por eso debemos ser agradecidos y buscar siempre que El sea exaltado y sea glorificado.
Demostramos humildad no siendo altivos ni prepotentes, ni engrandeciéndonos a nosotros mismos; ni exaltandonos a nosotros mismos. No siendo vanidosos. (como hacen los pavos reales)
Demostramos humildad usando nuestros talentos y nuestra capacidad sin despreciar las capacidades de los hermanos. Debemos ser sabios y valorar a las personas que nos rodean nunca menospreciar a nadie ni hacer acepcion de personas. (Lucas 17:10 y Romanos 12:3-7);
La llave de nuestra obediencia es nuestra voluntaria humildad, y no la humillación y obediencia forzada por una circunstancia. (Santiago 4:10).
La soberbia corroe y destruye la integridad.
El Salmo 19:12-13 nos hace prestar atención a cuando el salmista afirma: “Preserva también a tu siervo de las soberbias, que no se enseñoreen de mí. Entonces seré íntegro y estaré libre de gran rebelión.” (RV95)
La soberbia siempre llevara a una persona a la rebelión, la soberbia nos ciega e impide ver nuestras propias faltas, y pecados es un sentimiento tan fuerte que aún cuando estamos totalmente equivocados ella nos hace capaces de retorcer los hechos que nos acusan cambiándolos de tal forma que nos justifiquen, (para quedar bien) aunque para eso tengamos que comprometer a otras personas (inclusive culpar a inocentes). Esto pasaba con los fariseos eran tan altivos y soberbios que quedaron ciegos hacia Jesus. Por tanto podemos afirmar que la integridad es una gran enemiga de la soberbia. Y viceversa. Cuanto mas justo e integro sea un cristiano menos soberbia y orgullo habra en El.
No podemos llamar a nuestros pecados como errores. Tenemos que comenzar a llamar a nuestros errores, pecados; pues el error es siempre la consecuencia de una acción mala descuidada o desobediente, y rebelde pero muchas veces admitimos esto cuando ocurre en la vida de otros. Tenemos mucha facilidad para juzgar a los demas y no para juzgarnos a nosotros mismos. Tenemos que examinarnos a nosotros mismos continuamente .Orar y velar por nuestra propia vida espiritual. Debemos saber que cada uno dará cuenta a Dios por si mismo. Esto se puede hacer pidiendo su ayuda al Espiritu Santo. Decirle Senor muestrame mis errores. Ayúdame Quiero ver como tu me ves. Muestrame el verdadero estado de mi alma.
SALMO 19
¿Quién está consciente de sus propios errores?
¡Perdóname aquellos de los que no estoy consciente!(de mis pecados ocultos)
13 Libra, además, a tu siervo de pecar a sabiendas;
no permitas que tales pecados me dominen.
Así estaré libre de culpa
y de multiplicar mis pecados.
¡Perdóname aquellos de los que no estoy consciente!(de mis pecados ocultos)
13 Libra, además, a tu siervo de pecar a sabiendas;
no permitas que tales pecados me dominen.
Así estaré libre de culpa
y de multiplicar mis pecados.
14 Sean, pues, aceptables ante ti
mis palabras y mis pensamientos,
oh Señor, roca mía y redentor mío.
mis palabras y mis pensamientos,
oh Señor, roca mía y redentor mío.
Muchos viven tratando de justificar su orgullo, y este no nos permite decir que pecamos o erramos , es bueno en ese momento cuando necesitamos poner en práctica todo lo que hemos aprendido sobre la integridad. Sobre la justicia-
¿Cómo podríamos andar en integridad, es decir: admitiendo SINCERAMENTE nuestros errores y faltas ; si el orgullo domina nuestro corazón?
La motivación real de una persona que alimenta la soberbia y a su propio yo: ella siempre dice “soy esto” “puedo aquello”, “gracias a mi”… “soy el experto soy el ungido de Dios”, “cuando yo dirijo la alabanza el cielo viene en la tierra”, “soy yo, yo, yo..”.
Busquemos agradar a Dios y exaltarlo siempre , ¡ten en el corazón el deseo sincero de agradar a Dios más que a los hombres o a sí mismo! (Gálatas 1:10). Recuerda que el día que tomaste la decisión de recibir a Cristo y de dejarlo entrar en su vida fue para que Él viviese y sea glorificado y que tu ego tu YO fuera crucificado. (Romanos 8:10).
En Hechos 13:22 está escrito que David fue “un hombre conforme al corazón de Dios”, aún cometiendo pecados y faltas gravísimas, como adulterar y asesinar , Dios sabía que David tenía un corazón sincero y que su arrepentimiento era verdadero. Samo 51. David nunca dejo que el orgullo y la soberbia entren en su corazon. El siempre vivio agradecido y dándole toda la gloria y honra a Dios. ¡No procures la gloria no busques el aplauso de los hombres! No vivas para ser famoso y que la gente te admire ¡Busca siempre alcanzar gracia a los ojos del Padre! alli hallaras verdadera libertad y bendicion!!
Características existentes en Lucifer.(satanas). El fue el primer vanidoso orgulloso y soberbio. Empezó a creerse demasiado sabio y demasiado importante. Y esto lo llevo a la rebelión. A volverse contra su Dios y creador. El empezo a querer crear su propio reino independiente. El pensaba Yo sere el rey y todos me adoraran y me serviran .
VEA EZEQUIEL 28
Hijo de hombre, di al príncipe de Tiro: ``Así dice el Señor DIOS: `Aun cuando tu corazón se ha enaltecido y has dicho: ``Un dios soy, sentado estoy en el trono de los dioses, en el corazón de los mares", no eres más que un hombre y no Dios, aunque hayas igualado tu corazón al corazón de Dios.
* El es un espíritu malvado inteligente, hábil y calculador.
* Soberbio, buscando alcanzar mayor gloria que la de Dios.
* Oportunista.
* Engaña a las personas para que le adoren.(usa la idolatria)
* Egocéntrico.
* Su objetivo es únicamente “robar, matar y destruir”.
>ADVERTENCIA DE LA BIBLIA No un recién convertido, no sea que se envanezca y caiga en la condenación {en que cayó} el diablo.
1 TIMOTEO 3.6 ¿Como vencer el orgullo y la soberbia?Mira lo que la Biblia dice de la soberbia y del orgullo
” ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios.” (I Corintios 10:31)
Hay un sentimiento demasiado arraigado dentro de cada ser humano, capaz de dominarlo de tal forma, que pocos consiguen escapar de el. Puede existir en muchas formas y diferentes intensidades, desde la más visible hasta la más imperceptible, pero su nombre no cambia, es siempre “vanidad”, orgullo.
Porque la rebelión {es como} pecado de adivinación, y la desobediencia, {como} iniquidad e idolatría. Por cuanto has desechado la palabra del SEÑOR, El también te ha desechado para que no seas rey. 1 SAMUEL 15. 23.
Santiago dice: “Pero él nos da mayor ayuda con su gracia. Por eso dice la Escritura: «Dios se opone a los orgullosos, pero da gracia a los humildes.» (NVI Santiago 4:6)
* Tu debes buscar a Dios en oración y desarrollar una mayor comunión intima con Dios y buscar cada dia ser lleno del Espiritu Santo. Tu ego debe ser controlado y santificado por Dios. Debes darle siempre toda la gloria y honra a Dios.
* Necesitas creer en lo que puedes hacer a través de Cristo. Di siempre todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
* Saber que todo cuanto haces no es mérito tuyo, sino de Dios que te capacita para hacerlo.
* Confía en el propósito de Dios trazó para tu vida. Dios es sabio. El tiene control de todo.
* Las experiencias y pruebas son para que tu fe sea perfeccionada. Para que crezcas.
* Dios no te da nada para que te pierdas. Él quiere que aprendas a poseer sin ser poseído. Sin ser esclavizado por lo que tienes.
“En el crisol se prueba la plata; en el horno se prueba el oro; ante las alabanzas, el hombre.” (Proverbios. 27:21)
Jeremías 9:23-24
Así dice el SEÑOR: No se gloríe( ENORGULLEZCA) el sabio de su sabiduría, ni se gloríe el poderoso de su poder, ni el rico se gloríe de su riqueza; mas el que se gloríe, gloríese de esto: de que me entiende y me conoce, pues yo soy el SEÑOR que hago misericordia, derecho y justicia en la tierra, porque en estas cosas me complazco --declara el SEÑOR.
1 PEDRO 5.5 Asimismo, {vosotros} los más jóvenes, estad sujetos a los mayores; y todos, revestíos de humildad en vuestro trato mutuo, porque DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS, PERO DA GRACIA(BENDICION) A LOS HUMILDES.
¿Por qué es el orgullo un pecado tan grande delante de Dios ? El orgullo es darnos el crédito a nosotros mismos por algo que Dios ha hecho. por la obra de Dios. El orgulloso toma la gloria que solo le corresponde a Dios y se la da a si mismo para que los otros lo admiren . El orgullo es en esencia autoexatacion es una auto-adoración. Cualquier cosa que hubiéramos hecho en este mundo, no habría sido posible si Dios no nos hubiera dado la vida y la salud para realizarla. Eso es por lo que le damos la gloria a Dios – porque solo Él la merece. Esto es justo. No debemos robarle la gloria a Dios.
Existe una diferencia muy grande entre la clase de orgullo que Dios odia y aborrece (Proverbios 8:13) y la clase de orgullo que sentimos acerca de las buenas notas de nuestro hijito . (este es un orgullo sano y licito) La clase de orgullo que procede de la auto- exaltacion es un grave pecado y Dios la aborrece porque es un obstáculo para buscarle a Él. Es un gran obstaculo.
El Salmo 10:4 explica que los orgullosos están tan llenos de sí mismos que sus pensamientos están muy lejos de Dios. “El malo, por la altivez de su rostro,(orgullo) no busca a Dios; no hay Dios en ninguno de sus pensamientos.” (nunca lo toma en cuenta) Esta clase de orgullo altanero, esta soberbia es lo opuesto al espíritu de humildad que Dios busca: “Bienaventurados los pobres de espíritu,(humildes) porque de ellos es el reino de los cielos.” (Mateo 5:3). Los “pobres de espíritu” son aquellos que reconocen su total ineptitud espiritual y su inhabilidad para venir a Dios aparte de Su divina gracia. Ellos se reconocen inútiles siervos. Vasos de barro. Y buscan la guia y consejo de Dios. Los orgullosos, los altivos por otra parte, están tan cegados por su soberbia, que piensan que no tienen necesidad de Dios o aún peor, que Dios debe aceptarlos como son, porque ellos merecen ser aceptados.
Ellos son muy importantes y muy intachables. Están llenos de justicia propia enganados por el diablo. Asi estaban los fariseos por eso no pudieron aceptar a Jesus y la salvación que el venia a dar a los hombres.
A través de toda la Escritura, Dios nos advierte y nos habla acerca de las consecuencias del orgullo. Proverbios 16:18-19 nos dice que, “Antes del quebrantamiento es la soberbia, y antes de la caída la altivez de espíritu. Mejor es humillar el espíritu con los humildes, que repartir despojos con los soberbios.” Satanás fue echado del cielo debido a la soberbia y al orgullo que lo llevaron a la rebelion (Isaías 14:12-15).
3 Cuando el Señor los haga descansar de su sufrimiento, de su tormento y de la cruel esclavitud a la que fueron sometidos, 4 pronunciarán esta sátira contra el rey de Babilonia:
¡Hay que ver cómo terminó el opresor,
y cómo acabó su furia insolente!
5 Quebró el Señor la vara de los malvados;
rompió el bastón de los tiranos
6 que con furia y continuos golpes
castigaba a los pueblos,
que con implacable enojo
dominaba y perseguía a las naciones.
7 Toda la tierra descansa tranquila
y prorrumpe en gritos de alegría.
8 Hasta los pinos y cedros del Líbano
se burlan de ti y te dicen:
«Desde que yaces tendido,
nadie viene a derribarnos».
9 Allá en lo profundo, por tu causa,
el sepulcro se estremece
al salir a tu encuentro;
por causa tuya despierta a los muertos,
a los que fueron jefes de la tierra.
Hace que los reyes de todas las naciones
se levanten de sus tronos.
10 Todos ellos responden y te dicen:
«¡También tú te has debilitado!
¡Ya eres uno más de los nuestros!»
11 Tu majestad ha sido arrojada al sepulcro,
junto con el sonido de tus arpas.
¡Duermes entre gusanos,
y te cubren las lombrices!
12 ¡Cómo has caído del cielo,
lucero de la mañana!
Tú, que sometías a las naciones,
has caído por tierra.
13 Decías en tu corazón:
«Subiré hasta los cielos.
¡Levantaré mi trono
por encima de las estrellas de Dios!
Gobernaré desde el extremo norte,
en el monte de los dioses.
14 Subiré a la cresta de las más altas nubes,
seré semejante al Altísimo».
15 ¡Pero has sido arrojado al sepulcro,
a lo más profundo de la fosa!
16 Los que te ven, te clavan la mirada
y reflexionan en cuanto a tu destino:
«¿Y este es el que sacudía a la tierra
y hacía temblar a los reinos,
17 el que dejaba el mundo hecho un desierto,
el que arrasaba sus ciudades
y nunca dejaba libres a los presos?»
18 Todos los reyes de las naciones
reposan con honor,
cada uno en su tumba.
19 Pero a ti, el sepulcro te ha vomitado
como a un vástago repugnante.
Los que murieron a filo de espada,
los que bajaron al fondo de la fosa,
te han cubierto por completo.
¡Pareces un cadáver pisoteado!
20 No tendrás sepultura con los reyes,
porque destruiste a tu tierra
y asesinaste a tu pueblo.
y cómo acabó su furia insolente!
5 Quebró el Señor la vara de los malvados;
rompió el bastón de los tiranos
6 que con furia y continuos golpes
castigaba a los pueblos,
que con implacable enojo
dominaba y perseguía a las naciones.
7 Toda la tierra descansa tranquila
y prorrumpe en gritos de alegría.
8 Hasta los pinos y cedros del Líbano
se burlan de ti y te dicen:
«Desde que yaces tendido,
nadie viene a derribarnos».
9 Allá en lo profundo, por tu causa,
el sepulcro se estremece
al salir a tu encuentro;
por causa tuya despierta a los muertos,
a los que fueron jefes de la tierra.
Hace que los reyes de todas las naciones
se levanten de sus tronos.
10 Todos ellos responden y te dicen:
«¡También tú te has debilitado!
¡Ya eres uno más de los nuestros!»
11 Tu majestad ha sido arrojada al sepulcro,
junto con el sonido de tus arpas.
¡Duermes entre gusanos,
y te cubren las lombrices!
12 ¡Cómo has caído del cielo,
lucero de la mañana!
Tú, que sometías a las naciones,
has caído por tierra.
13 Decías en tu corazón:
«Subiré hasta los cielos.
¡Levantaré mi trono
por encima de las estrellas de Dios!
Gobernaré desde el extremo norte,
en el monte de los dioses.
14 Subiré a la cresta de las más altas nubes,
seré semejante al Altísimo».
15 ¡Pero has sido arrojado al sepulcro,
a lo más profundo de la fosa!
16 Los que te ven, te clavan la mirada
y reflexionan en cuanto a tu destino:
«¿Y este es el que sacudía a la tierra
y hacía temblar a los reinos,
17 el que dejaba el mundo hecho un desierto,
el que arrasaba sus ciudades
y nunca dejaba libres a los presos?»
18 Todos los reyes de las naciones
reposan con honor,
cada uno en su tumba.
19 Pero a ti, el sepulcro te ha vomitado
como a un vástago repugnante.
Los que murieron a filo de espada,
los que bajaron al fondo de la fosa,
te han cubierto por completo.
¡Pareces un cadáver pisoteado!
20 No tendrás sepultura con los reyes,
porque destruiste a tu tierra
y asesinaste a tu pueblo.
¡Jamás volverá a mencionarse
la descendencia de los malhechores!
21 Por causa de la maldad de los padres,
preparen un matadero para los hijos.
¡Que no se levanten para heredar la tierra
ni cubran con ciudades la faz del mundo!
la descendencia de los malhechores!
21 Por causa de la maldad de los padres,
preparen un matadero para los hijos.
¡Que no se levanten para heredar la tierra
ni cubran con ciudades la faz del mundo!
22 «Yo me levantaré contra ellos
—afirma el Señor—.
Yo extirparé de Babilonia
nombre y descendencia,
vástago y posteridad
—afirma el Señor Todopoderoso—.
23 La convertiré en lugar de erizos,
en charco de agua estancada;
la barreré con la escoba de la destrucción»,
afirma el Señor Todopoderoso.
—afirma el Señor—.
Yo extirparé de Babilonia
nombre y descendencia,
vástago y posteridad
—afirma el Señor Todopoderoso—.
23 La convertiré en lugar de erizos,
en charco de agua estancada;
la barreré con la escoba de la destrucción»,
afirma el Señor Todopoderoso.
Él , satanas , tuvo la egoísta audacia de intentar reemplazar a Dios mismo como el legítimo rey y gobernante del universo. Pero Satanás debido a su rebelion contra Dios será lanzado al abismo del infierno en el juicio final de Dios. Para aquellos que se levantan desafiantes contra Dios, no les espera nada más que el desastre, la condenacion eterna “Porque yo me levantaré contra ellos, dice Jehová de los ejércitos, y raeré de Babilonia el nombre y el remanente, hijo y nieto, dice Jehová.” (Isaías 14:22).
Tristemente el orgullo ha impedido que muchos acepten a Jesucristo como su Salvador . El rehusar admitir el pecado y reconocer que en nuestras propias fuerzas no podemos hacer nada para recibir la vida eterna, ha sido una piedra de tropiezo para mucha gente orgullosa y soberbia. No debemos gloriarnos de nosotros mismos, pero si queremos glorificar algo, entonces debemos proclamar las glorias de Dios. Lo que decimos de nosotros mismos, no significa nada en la obra de Dios. Es lo que Dios dice acerca de nosotros, lo que hace la diferencia.Eso es lo que vale (2 Corintios 10:13).
POR WILLY Y KARINA HAMEL
MISIONEROS CRISTIANO DEL ESPIRITU SANTO
SANTA CRUZ BOLIVIA
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